Dildos atómicos

Kernkraft 400 por Zombie Nation. Temazo ¿no? ya no se hace música techno como antes, ahora es todo loops trompeteros y bass drops. Pero ésto... buah, una melodía pegadiza, cambios de ritmo precisos y bien calculados y un videoclip cutre a más no poder. Gran año 1999.



A muchos os sonará este tema (supongo, porque a mi me sonaba y nunca pisé una discoteca) y su peculiar tonadilla. Pero lo que a muchos no os sonará, es la versión original, pues pertenece a un juego de Commodore 64 de 1984 llamado Lazy Jones, posteriormente porteado a Spectrum y MSX (y Tatung Einstein, pero bueno...).

Desarrollado por el británico David Whittaker, "famoso" por sus composiciones musicales para videojuegos de microordenadores durante los 80, el juego te ponía en la piel de Jones, un bedel o botones de un hotel, que se aburre y decide ir entrando en las habitaciones para jugar a videojuegos, intentando que no le pille el encargado (o el fantasma, ya que todos los hoteles tienen uno, como bien es sabido), alcanzando un total de 14 minijuegos dentro del propio juego.

Pero a pesar de que Zombie Nation afanase uno de sus temas más simpáticos para crear un éxito electrónico mundial, el propio Lazy Jones no estaba libre de culpa, aquí tenéis la OST completa, puesta de seguido (es curiosa, no son pistas aisladas, si no que enlazaba con una parte un otra de la música, en función de en qué habitación entrases, dando sensación de continuidad). Escucharla entera del tirón puede dejarte la cabeza como un bombo, aviso:

Pues aquí nos encontramos:
99 Luftballons de Nena (1983) en el minuto 1:30
Living on the Ceiling de Blackmange (1982) en el 4:03
Fade to Grey de Visage (1980) en el 4:30

Supongo que quien disfrutase de la música electrónica en los 80s estaría encantado con Lazy Jones, pero la verdad es que también podría haberse llamado Lazy Whittaker con el jerol que manejaba el tío a la hora de meter música famosa para vender más juegos. Aún así, Whittaker tiene otras buenas y grandes OST, como la de Shadow of the Beast, así que se lo perdonamos (¿o no?).

Commodore 64 fue el único microordenador del que pude disfrutar, y me trae buenos recuerdos. Pero sobretodo tenía mucha potencia y un gran chip de sonido, el SID. Tanto que a día de hoy sigue siendo usado en la scene chiptune, tanto por aficionados que hacen demakes de temas, como por compositores originales. Aquí os dejo como un pequeño ejemplo, que hará las delicias de los aficionados al chiptune como yo (¿será por eso que me gusta tanto Hora de Aventuras?):